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Culpa: “Te hace sentir que todo es tu culpa… hasta lo que no hiciste.”

Actualizado: 24 abr

Hay formas de violencia que no gritan, pero calan hondo.Una de las más sutiles —y peligrosas— es cuando alguien instala la idea de que todo lo que ocurre, incluso lo que está fuera de tu control, es culpa tuya.


Así empieza la culpabilización: una dinámica emocional que distorsiona tu percepción, apaga tu voz y te encierra en un círculo de autocrítica constante. Te hace dudar de lo que sentís, de lo que hiciste, de lo que eres.

Y lo más doloroso… es que muchas veces te lo terminas creyendo.


La culpa no siempre es tuya, pero el peso sí

En relaciones donde hay manipulación, control o maltrato emocional, la persona que agrede suele deslizar su responsabilidad hacia el otro. Te dice que exageras, que reaccionaste mal, que provocaste la situación. Y así, poco a poco, te vas sintiendo culpable hasta de lo que no hiciste.

Cuando todo parece tu culpa, el mundo se vuelve más pequeño. Te cuesta hablar, pedir ayuda, confiar en tus emociones.

Pero hay algo que nunca deberías olvidar:lo que sentís es válido, y mereces que te escuchen sin juzgarte.


🌿 Recuperar tu poder empieza por reconocer lo que no te pertenece

Sanar no es negar lo vivido. Es ponerlo en palabras, entenderlo, resignificarlo. Es volver a mirar tu historia desde un lugar más justo, más amable, más tuyo.

En Café Terapia creemos que ningún proceso de recuperación es lineal, pero todos merecen un espacio cuidado y respetuoso para empezar.

Encuentra al terapeuta que te acompañe a ponerle nombre a lo que viviste… y a liberarte de lo que nunca debiste cargar.

Porque no todo lo que te hicieron sentir… te define.

 
 
 

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